Cuánto tarda un gato en recuperarse de una fractura

Esta pregunta no tiene una única respuesta, ya que el tiempo de recuperación que el gato necesita tras una fractura va a depender del tipo de fractura, de su localización, del tratamiento requerido para reducirla y de las propias características de cada animal. Lógicamente, no es lo mismo la rotura limpia de una pata que una fractura múltiple de cadera ni se va a recuperar igual un animal joven que uno anciano. Tampoco es igual resolver una fractura con un vendaje para inmovilizar una extremidad que con una operación en la que se pongan placas o fijadores externos.

Por estos motivos, es importante que ante una fractura hablemos con el veterinario para que nos explique cuáles son sus características, cómo afecta a nuestro gato y cuál es el tratamiento a seguir, tanto en la clínica como en el hogar. Para que nos hagamos una idea, lo habitual es que la recuperación tras una fractura se prolongue, en general, por varias semanas, entre 4 y 12 semanas, pues el hueso requiere tiempo para consolidarse. Es mucho y es posible que el gato quiera hacer vida normal antes, pero hay que seguir las pautas del veterinario para que la recuperación sea satisfactoria.

¿Un gato se puede recuperar de una fractura sin tratar?

Una fractura sin tratar producirá dolor en el gato, problemas de movilidad y otras complicaciones más o menos graves dependiendo de la fractura. Si no se trata, el gato no se recuperará por completo. Además, una fractura sin tratar puede curarse mal o no llegar a curarse nunca, lo que provocará lesiones de mayor o menor gravedad, con los consecuentes problemas de movilidad o incluso dolor crónico.

Por todo ello, en caso de fractura es indispensable acudir al centro veterinario.

En primer lugar, si nuestro gato sufre una fractura, lo principal es seguir las recomendaciones del veterinario. Este profesional nos explicará cómo debemos cuidarlo en el hogar, qué fármacos debemos administrarle para que no sienta dolor ni se presenten complicaciones, como infecciones bacterianas secundarias, cómo debemos hacerle las curas, qué manejo posoperatorio requiere, cuándo debemos acudir a revisión o a qué signos clínicos de alarma tenemos que atender.

Como hemos dicho, en función de la situación de cada gato, el tipo de fractura y los demás condicionantes que hemos señalado, habrá diferencias en el posoperatorio, pero podemos destacar algunos cuidados, como los siguientes, que serán muy parecidos en todos los casos:

• Mantener al gato en un espacio tranquilo, sin lugares elevados a los que pueda saltar ni escaleras, ya que hay que evitar este tipo de movimientos.
• No es conveniente dejarlo salir al exterior ni que interaccione con otros animales con los que pueda jugar con brusquedad. Tampoco hay que dejar que corra.
• Adaptar el ejercicio, es decir, el ejercicio ayuda a la recuperación, pero debemos hacerlo siguiendo siempre las pautas dadas por el veterinario, pues son las que se adaptarán a las necesidades de cada gato. La actividad física puede ser pasiva, es decir, seremos nosotros los que movamos el cuerpo del animal, o activa. Es posible que tengamos que recurrir a técnicas de fisioterapia y rehabilitación.
• Seguir los cuidados veterinarios que este profesional nos haya indicado, como dar medicación y hacer curas. También hay que vigilar que la recuperación esté siendo correcta y avisar al veterinario si detectamos alguna anomalía, como infección de la incisión, vendaje que se mueve o se moja, anorexia, decaimiento, etc.
• Adaptar el hogar, ya que es posible que necesitemos adoptar algunas medidas para facilitar la vida cotidiana del gato. Por ejemplo, si tiene dificultades para entrar y/o salir del arenero, habrá que buscar una bandeja de bordes más bajos o, si resbala en el suelo, tendremos que poner alfombras o cualquier otra superficie en la que consiga un mejor agarre.
• Usar el collar isabelino si es preciso, puesto que es un elemento que puede resultar imprescindible si el gato llega con la boca a la zona dañada y se autolesiona. Esta situación puede complicar y retrasar la recuperación, motivo por el que debemos prevenir, por ejemplo con el uso del collar isabelino. Si en el centro no te han dado uno, puedes adquirirlo en plataformas como Amazon: Comprar collar isabelino para gatos.
• Utilizar empapadores. Para los gatos que en un principio no sean capaces de levantarse debemos preparar una cama cómoda y cubrirla con empapadores para que no se manche si se orina encima. Hay que tener en cuenta que algunas fracturas pueden afectar a la evacuación y será necesario ayudar al gato y mantenerlo siempre limpio. La higiene la podemos hacer con toallitas específicas para gatos, espuma para el lavado en seco o agua y jabón. Lógicamente, no se puede bañar al gato si está vendado, con puntos o con fijadores externos.

Ya hemos hablado de cuánto tarda un gato en recuperarse de una fractura y cómo favorecer esa recuperación pero, ¿qué ocurre si no notamos ningún avance? Aunque los gatos suelen recuperarse bien de sus fracturas, la evolución no siempre es tan buena como debería. Por ejemplo, podemos notar que el gato no se mueve en el tiempo que nos ha marcado el veterinario o aparece alguna complicación, como una infección. Las "Posturas de un gato enfermo" que mostramos en este post pueden ayudarte a determinar si algo va mal.

Es muy importante mantener al gato vigilado y, ante cualquier anomalía, contactar de inmediato con el veterinario para que pueda evaluarlo y ponerle remedio lo antes posible. Un mal posoperatorio puede hacer fracasar una operación o una inmovilización.

Como ya nos habrá informado este profesional antes del tratamiento, en ocasiones, este puede salir mal o no conseguir unos resultados tan buenos como los esperados. En estos casos, habrá que valorar la situación actual y, teniendo en cuenta las ventajas y los inconvenientes para el gato según sus características particulares, decidir si conviene volver a operar o establecer algún tipo de fisioterapia o rehabilitación específica, como la acupuntura, la magnetoterapia o la acuaterapia.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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