Mi gato tiene diarrea y el ano irritado: causas y qué hacer

La irritación del ano, como hemos comentado, puede ser una complicación asociada a la diarrea. Es decir, un gato que acuda en repetidas ocasiones al arenero para defecar y que elimine unas deposiciones líquidas no es extraño que acabe por sufrir una irritación anal, sobre todo si la frecuencia es mucha y se prolonga durante varios días.

En los casos más graves podría llegar a producirse un prolapso anal, que es una urgencia veterinaria que requiere una rápida atención. Un gato puede tener diarrea por diferentes motivos. Vamos a repasar los más habituales:

• Parásitos intestinales: estos parásitos internos pueden alterar el funcionamiento normal del sistema digestivo, provocando molestias como la diarrea. Es más habitual que originen sintomatología en gatitos de corta edad.
• Enfermedades infecciosas: también los ejemplares más jóvenes y sin vacunar son los más afectados por enfermedades como la panleucopenia, una dolencia de origen vírico que provoca una característica diarrea, muchas veces con sangre. Hay otras patologías causadas por virus y bacterias.
• Estrés: los gatos son animales muy sensibles a los cambios, llegando a sufrir altos niveles de estrés por modificaciones en su rutina o entorno que a nosotros nos parecen insignificantes. El estrés puede desencadenar diarrea, así como otros trastornos a nivel físico o conductual.
• Alimentación: una dieta inadecuada, la ingesta de ingredientes no recomendados para gatos o cambios bruscos en el menú pueden alterar el sistema digestivo hasta la diarrea.
• Otras causas: existen numerosas patologías que pueden cursar con la diarrea entre sus signos clínicos, por ejemplo, problemas hepáticos o pancreáticos, enfermedad inflamatoria intestinal, hipertiroidismo o neoplasias digestivas. Además, la administración de ciertos fármacos, como los antibióticos, también se relaciona con la aparición de diarrea como efecto adverso.

Te hablamos de la "Diarrea en gatos: causas, cuánto dura y qué darles" en el siguiente post que te recomendamos.

Imagen: Reddit

¿Tu gato tiene diarrea y el ano irritado y no sabes qué hacer? La actuación ante un caso de diarrea e irritación anal va a depender de las circunstancias de cada ejemplar. Si la irritación es leve, es muy posible que remita tratando la causa de la diarrea. Al contrario, si es grave, vamos a tener que actuar a la vez contra la irritación y contra la diarrea. En cualquier caso, hay que tener en cuenta la edad del gato.

• Cuando nos encontramos ante un ejemplar de corta edad, sin vacunar, muy mayor o con alguna enfermedad ya diagnosticada, se hace necesario contactar con el veterinario.
• Si el gato con ano irritado y diarrea es adulto y está sano, una ligera diarrea sin más sintomatología y de la que tenemos una causa probable, por ejemplo, la ingesta de un alimento que le haya podido sentar mal, puede remitir de forma espontánea en cuestión de 24 horas o, como mucho, instaurando un ayuno, seguido de la introducción de una dieta blanda antes de volver a ofrecer el alimento habitual.

Pero es probable que un gato con el ano inflamado sufra una diarrea de varios días de evolución que no sepamos a qué se debe. En estos casos, y siempre que el gato pertenezca a un grupo vulnerable como los que hemos mencionado, hay que acudir al veterinario. El profesional examinará a nuestro gato, nos hará preguntas para completar la historia clínica y prescribirá las pruebas necesarias para obtener un diagnóstico, como analíticas o ecografías.

Por ejemplo, si se detecta la presencia de parásitos, el tratamiento será el antiparasitario correspondiente. Una enfermedad vírica como la panleucopenia no tiene tratamiento, pero se puede ingresar al gato y administrar fluidoterapia y fármacos intravenosos para controlar la sintomatología. El estrés tendrá que combatirse modificando las condiciones de vida del animal y es posible que se haga necesario contactar con un experto en conducta felina o etólogo.

Además del tratamiento para la diarrea, si la irritación es considerable y tenemos al gato con el ano en carne viva, el veterinario también nos recetará tratamiento para aliviarla. En resumen, es fundamental acudir a los profesionales para obtener un diagnóstico. Atacar la causa de la diarrea es la clave para controlar tanto este problema como la irritación que provoca.

Como hemos explicado, si nos centramos en tratar la irritación anal, no siempre vamos a poder resolverla. Por ejemplo, si esta se debe a una diarrea por un alimento inadecuado, sí podría remitir sola, una vez la dieta se normalice.

Pero si la causa es el hipertiroidismo, por mucho que tratemos la irritación, seguirá produciéndose en tanto continúe la diarrea e incluso puede agravarse. Por lo tanto, si queremos optar por algún remedio casero para aliviar la irritación anal del gato, siempre debemos utilizarlo a la vez que el tratamiento prescrito por el veterinario y solo si este lo ha aprobado.

Entre los remedios caseros podemos citar el aloe vera o la vaselina, que se pueden aplicar en la zona, después de limpiarla, varias veces al día, dando un suave masaje para lastimar lo mínimo posible al gato. Puede hacer falta recortar, con mucho cuidado, el pelo de esa región. Estos remedios están indicados para irritaciones leves. Los casos graves suelen necesitar antiinflamatorios, que solo puede recetar el veterinario. Siempre hay que vigilar que el animal no se lama los productos aplicados.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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