Mi gata tiene una bolita en su herida de esterilización: causas y qué hacer

Es habitual que tras realizar una esterilización a una gata, se presente una hinchazón en el vientre que generalmente es leve y se puede apreciar al pasar la mano por la zona de la incisión. Estas inflamaciones suelen desaparecer en unos pocos días, o en algunas ocasiones, semanas. Esto se debe a que al cerrar la herida, se suele realizar una sutura en tres capas. La capa más interna actúa como capa de resistencia, la segunda es subcutánea y cierra el tejido conectivo y la grasa entre la piel y la pared corporal, y la última, la más externa, cierra la piel. En esta última capa, se puede emplear un pegamento quirúrgico que acelera el cierre y la curación, o utilizar suturas reabsorbibles, lo que evita la necesidad de retirar los puntos.

Durante este proceso de curación, es posible que las gatas rocen la zona, lo que puede provocar la inflamación de los tejidos, aunque a veces la inflamación simplemente se produce por el cierre de estas capas. En cualquier caso, las inflamaciones postoperatorias consisten en bultos firmes y no dolorosos que suelen desaparecer en pocos días o semanas sin necesidad de ningún tratamiento específico.

Otra causa que puede explicar por qué tu gata tiene una bolita en su herida de esterilización son los seromas, que son una complicación relativamente común en el proceso de ovariohisterectomía en las gatas. Los seromas consisten en una acumulación de líquido procedente de la linfa de la zona de los puntos. Este líquido se forma como parte del proceso de cicatrización y puede considerarse también parte de una inflamación postoperatoria, desapareciendo en días o semanas. Sin embargo, si el bulto es grande, crece de tamaño, duele o cambia de color, debes volver al centro veterinario, ya que podría haberse infectado o estar complicándose y requerir drenaje.

Por otro lado, en las primeras horas después de la cirugía, se puede formar un hematoma en la herida de esterilización, que a veces puede acompañar al bulto del seroma. Esto se produce como consecuencia de la manipulación de los tejidos de la hembra durante la cirugía. Las gatas tienen más grasa que otras hembras, y al romperse las pequeñas venas, aparece un gran moratón. Normalmente, este hematoma se resuelve con el tratamiento con trombocid de 2 a 3 veces al día durante una semana. Es fácil de detectar, ya que la coloración de la piel alrededor de la incisión se torna oscura o rojiza. Aunque sea muy llamativo, normalmente las gatas no muestran dolor y siguen haciendo vida normal.

¿Es peligroso que mi gata se lama la herida de la esterilización? Esta es una pregunta que cuidadores de gatas recién esterilizadas se pueden hacer con bastante frecuencia y la respuesta es un claro sí. Cuando una gata tiene una herida de esterilización reciente y se permite lamerla, morderla o arañarla, el riesgo de infección aumenta significativamente. Además, puede provocar dehiscencias de las suturas y la consiguiente apertura de las incisiones.

Por lo tanto, si observas un bultito en la herida de esterilización de tu gata recién esterilizada, podría indicar que está infectada. Esto se debe a que tanto en su boca como en sus patas existen numerosos microorganismos que pueden promover el desarrollo de una infección. Del mismo modo, si rozan o mantienen contacto con suelos u otras superficies que contienen bacterias y otros agentes patógenos, estos pueden invadir la incisión e infectarla, especialmente si está ligeramente abierta.

Síntomas de infección

Los principales signos clínicos de una herida de esterilización infectada incluyen:

• Fiebre.
• Hinchazón o dolor en la zona.
• Enrojecimiento.
• Secreción de líquido verdoso o amarillento maloliente.
• Sensibilidad en la zona.

Para prevenir estas infecciones, se recomienda colocar una protección en la herida o usar un collar isabelino para evitar que las gatas se laman la incisión y puedan lastimarse. Además, se pueden administrar antiinflamatorios y antibióticos según lo indicado por el veterinario, junto con limpiezas y desinfecciones diarias. Si la herida ya está infectada, se debe realizar un antibiograma y aplicar el tratamiento más efectivo para controlar la infección.

En este artículo hablamos más en profundidad: "Herida de esterilización de una gata infectada: causas y qué hacer".

Por último, también es posible notar un bulto en la herida de esterilización de tu gata debido a una hernia postesterilización, conocida como hernia ventral de la línea media, que corresponde con la zona donde se realizó la incisión en el abdomen para la ovariohisterectomía. Dependiendo del tamaño, esta hernia puede permitir la salida del contenido abdominal a través de la incisión, lo que puede llegar a comprometer la circulación sanguínea en casos graves. En tales situaciones, podría requerirse otra cirugía para reducir la hernia.

La hernia después de la esterilización de la gata es poco común y ocurre en menos del 1% de las gatas esterilizadas durante la primera semana tras la intervención. Suele ser el resultado de errores en la técnica quirúrgica, como el uso de una sutura de tamaño incorrecto o la omisión de suturar la fascia del músculo recto del abdomen externo durante el cierre.

Tras ver las diferentes causas que pueden explicar por qué tu gata tiene una bolita en su herida de esterilización, aunque algunas forman parte del proceso de curación y desaparecen solas, es importante llamar al veterinario para informar de la situación. El profesional decidirá si es necesario acudir presencialmente a la clínica o no. Para ello, también es importante prestar atención al comportamiento general de la gata por si presentara alguno de los síntomas anteriormente descritos.

Por otro lado, recuerda que es recomendable utilizar un collar isabelino o preguntar al veterinario si es posible cubrir la herida para evitar que la gata la lama.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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