Cuándo esterilizar a un gato

Antes de pasar a hablar de cuándo esterilizar a un gato o a una gata, conviene que tengamos claro qué es la esterilización. Lo cierto es que, en general, utilizamos este término para referirnos a la extracción de los testículos, en el caso de los gatos, y del útero y de los ovarios, o solo de los ovarios, en las hembras.

Realmente esto es una castración o, técnicamente, orquiectomía, ovariohisterectomía u ovariectomía, según los órganos extirpados. Retirar estos órganos impide que el animal tenga el celo y, en consecuencia, se reproduzca.

La esterilización sería solo la imposibilidad de la reproducción, lo que consigue, por ejemplo, una ligadura de trompas o de conductos, como la vasectomía. No son técnicas muy extendidas en los animales, ya que, además de la descendencia, se quiere evitar el celo y los efectos negativos que sobre la salud tienen las hormonas sexuales, como los tumores de mama o la infección de útero, también llamada piometra. Por los motivos que hemos mencionado es por lo que se recomienda castrar a los gatos, ya sean machos o hembras.

Si tienes dudas sobre si ¿Castrar o esterilizar? Ventajas e inconvenientes no dudes en consultar el siguiente artículo para tener más información sobre el tema.

¿A partir de cuándo se puede esterilizar un gato? Si estamos pensando en esterilizar a nuestro gato macho, debemos saber que el mejor momento es una vez ha completado su desarrollo físico, pero aún no ha empezado a mostrar ninguna conducta reproductiva, que en los machos es habitual que sea el marcaje con orina, aunque hay otras causas de que nos encontremos orina fuera del arenero.

Estamos hablando de entre los 7-9 meses de edad, aunque será el veterinario quien tenga la última palabra según las circunstancias de cada gato, pues los hay más precoces o con mayor riesgo sin conviven con gatas enteras. Esto no quiere decir que no podamos castrarlo con posterioridad, solo que a esta edad sería más recomendable para evitar las consecuencias de sucesivos periodos de celo.

Al igual que en el caso de los gatos, la recomendación es que la esterilización de las hembras se haga antes de su primer celo y después de completado su desarrollo. De esta forma, prevenimos, no solo las conductas asociadas al celo, que suponen un estrés para el gato y para la convivencia, sino la posibilidad de que padezca enfermedades como las que hemos mencionado, ya que estas se asocian a la actividad de hormonas que desaparecen con la operación.

¿Cuándo tiene una gata su primer celo? Lo cierto es que se ve muy influenciado por las horas de luz solar, entre otros factores, así que la edad exacta va a depender bastante de la época de nacimiento de la gatita, de sus circunstancias vitales, características, etc. Algunas pueden ser tan precoces como los cuatro meses, mientras que otras pueden retrasar el celo hasta los siete o incluso un poco más. En general, suelen operarse sobre los seis meses, aunque será el veterinario quien tenga la última palabra.

Al igual que en los machos, esto no quiere decir que no se puedan operar con posterioridad, pero hay que saber que los efectos beneficiosos que la castración tiene sobre las patologías dependientes de las hormonas del ciclo sexual van a verse reducidos cuanto más tiempo tardemos en intervenir. Por ejemplo, si retrasamos la operación años la gata igualmente podrá desarrollar tumores en las mamas.

Te dejamos este otro artículo de SoyUnGato sobre el Celo en gatos y gatas: síntomas, inicio y qué hacer para que puedas saber más.

Sí, es posible esterilizar gatos y gatas que no han sido vacunados, aunque, lógicamente, lo ideal sería que todos fuesen desparasitados y vacunados según el protocolo más adecuado a cada caso. Esto supone beneficios para su salud y unas mejores condiciones a la hora de entrar en quirófano. De todas formas, de nuevo vuelve a ser tarea del veterinario, recordemos que es el único profesional con competencias para vacunar y operar, decidir en qué momento y en qué condiciones puede ser operado un gato.

En cualquier caso, el gato debe estar sano y desparasitado para poder ser sometido a esta intervención. Para comprobarlo el veterinario lo examinará y es aconsejable que realice, por lo menos, una analítica de sangre por si hubiese alguna patología aún no detectada. Un electrocardiograma también se recomienda siempre antes de cualquier intervención.

No dudes en echarle un vistazo a esta Guía completa para desparasitar a un gato.

Sí, es posible esterilizar a una gata durante su periodo de celo, aunque lo aconsejable es esperar a que este concluya. La razón es que habrá mayor irrigación sanguínea en la zona, lo que implica un mayor sangrado. Por eso siempre se recomienda o esterilizar antes del celo o esperar a que este finalice. El problema es que en algunas gatas esta espera supone un riesgo. En estos casos, será el veterinario quien otra vez deba valorar las ventajas y los inconvenientes de operar en ese momento y las de esperar.

No hay ninguna edad límite para la esterilización. Mientras la salud del animal le permita entrar en quirófano, lo que se valora en función de los resultados de sus pruebas preoperatorias, realizar la esterilización es posible. Eso sí, hay que saber que puede ser tarde para que desaparezcan conductas relacionadas con la reproducción, como el marcaje con orina, o el desarrollo de algunas enfermedades como los tumores mamarios.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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