¿Los gatos tienen hipo?

Aunque no sea una conducta usual en ellos, los gatos pueden tener hipo. Por regla general, no suele tratarse de un evento peligroso que requiera tu inmediata intervención. De hecho, suele remitir de forma natural al cabo de pocos segundos. Eso sí, debes reparar en su frecuencia e intensidad puesto que, a veces, puede cursar con vómitos o dificultad para respirar. En estos casos, no deberías demorar la consulta al veterinario.

Las causas que desencadenan este repentino y temporal cierre de la epiglotis en los gatos son dispares. Saber identificar su origen será decisivo para impedir que vuelva a producirse. Entre los factores más frecuentes del hipo en los gatos, merecen tu atención los siguientes:

• Comer o beber muy rápido o en gran cantidad: esta es la génesis del hipo en gatos bebés más repetida, especialmente si son alimentados con biberón.
• Tricobezoares o bolas de pelo.
• Trastornos metabólicos: como el hipotiroidismo y el hipertiroidismo. Estas afecciones sobreestimulan el diafragma y provocan el hipo en gatos.
• Exposición prolongada al frío: los gatos recién nacidos o de corta edad, así como las razas sin pelo o las que carecen de subcapa interna (como el Cornish rex o el Devon rex), son especialmente proclives a convertirse en un gato con hipo.
• Alergias: en estos casos, el hipo puede ir acompañado de dificultad para respirar y deberías consultarlo con el veterinario.
• Estrés, episodios de ansiedad y mucho nerviosismo: los cambios de rutina y los eventos repentinos que rompen su cotidianidad, más si cabe si resultan lesivos para su integridad, pueden alterar el curso de su respiración y predisponerlos al hipo.

Como ves, la primera causa está relacionada directamente con sus hábitos de comer, por lo que no te resultará dificil darte cuenta de ella. Aun así, debes estar atento para comprobar si tu gato come demasiado rápido y poner remedio a ello.

Si afirmas mi gato tiene hipo, en principio, no deberías preocuparte. Su organismo está facultado para resolverlo por sí mismo en pocos segundos. Solo si es persistente o de una elevada intensidad (que le provoca el vómito o le impide respirar con normalidad) deberías mediar. Tener la costumbre de observar su conducta te ayudará a esclarecer el porqué del hipo y facilitará la puesta en práctica de las medidas preventivas pertinentes (ahondamos en ellas más abajo).

Sabemos que si te topas con tu gato con hipo, te sentirás tentado a darle un susto. Sin embargo, este comportamiento está totalmente desaconsejado en los gatos. Su efecto no haría sino agravar su malestar. Como hemos mencionado en el anterior apartado, si a tu gato tiene hipo no debes alarmarte, ya que es una conducta completamente inofensiva que debería durar unos segundos, sin exceder el minuto.

Por tanto, teniendo en cuenta que lo que a los gatos les da hipo con más frecuencia es comer o beber de forma compulsiva, lo más prudente es relajarlo o desviar su atención con caricias, un paseo o una sesión de juego. Observa atentamente a tu gato durante los segundos que dura su hipo para garantizar que no va a mayores.

Si ves que el hipo en tu gato dura más de lo debido o que siempre tiene hipo, no dudes en llevarlo al veterinario. Al inicio del artículo hemos comentado la confusión que puede generar el sonido del hipo con el hecho de que el gato haya ingerido cualquier otro cuerpo extraño y esté atascado en su garganta. Para evitar problemas, lo mejor es acudir a un profesional que nos ayude a resolver la situación.

Es probable que si es la primera vez que descubres a tu gato con hipo, tu reacción sea intervenir para aliviarlo. No obstante, tal y como hemos explicado, esta iniciativa puede ser innecesaria e incluso contraproducente. Atendiendo a las principales causas del hipo en los gatos, es sencillo implementar las acciones preventivas adecuadas. Para ponértelo más fácil, te las resumimos a continuación.

Toma nota estos consejos para prevenir el hipo en gatos:

• Establece rutinas para comer: evita el ayuno prolongado y si tu minino es muy glotón no dejes la comida a su alcance durante todo el día. Resulta preferible que exista un horario con 2 tomas repartidas a lo largo del día (por la mañana y la noche). Así, prevendrás que maúlle por la noche porque tiene hambre.
• Opta por los comederos altos y por las fuentes para gatos: los primeros prevendrán los atracones, puesto que les obligan a realizar un mayor esfuerzo al alimentarse. Las segundas los estimulan sensorialmente y los motivan a hidratarse. El agua va fluyendo de forma pausada, por lo que no beberá de forma acelerada.
• Mantén una rutina de cepillado: especialmente durante los períodos de muda (la primavera y el otoño) y emplea un cepillo acorde a su tipo de pelo. Si es largo, deberías decantarte por uno de púas largas, metálicas y separadas y si es corto, por uno de púas cortas y flexibles.
• Ofrécele malta para gatos, catnip le ayudará a expulsar de forma natural las bolas de pelo que se hayan podido formar en su tracto gastrointestinal tras el acicalamiento.
• Proporciónale un entorno seguro y cómodo: en el que las rutinas y el enriquecimiento ambiental estén presentes. Debe contar con un refugio, preferentemente en altura, al que acceder cuando lo requiera.
• Presta atención a la temperatura de tu hogar (según los expertos, la idónea son 20 °C), evita las corrientes de aire y no permitas que salga al exterior si hace frío.

Estamos seguros de que, poniendo en práctica estos consejos, el hipo en los gatos ya no es una preocupación para ti. Si a tu gato le da hipo, a partir de ahora ya sabes cómo proceder.

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