Vómito amarillo en gatos: causas y tratamientos

Los gatos son unos animales diseñados para ingerir pequeñas cantidades de alimento varias veces al día, no tolerando bien dos grandes tomas diarias a diferencia de los perros. Sin embargo, bajo ciertas condiciones como el estrés o ciertos problemas de salud nuestros gatos pueden perder el apetito y dejar de comer, lo que se conoce como ayuno.

Cuando un gato pasa más horas de las adecuadas sin comer se acumula la bilis y los ácidos del estómago que resultan muy irritantes para las paredes y la mucosa del estómago, haciendo que el gato vomite por este motivo, para liberar esos fluidos tan irritantes que les hacen encontrarse mal. Por este motivo, cuando un gato pasa mucho sin comer puede tener vómitos amarillentos por el contenido de estos líquidos, sin tener sangre ni moco.

Tratamiento del ayuno prolongado en gatos

Es sencillo el tratamiento en este caso, basta con ir ofreciéndole al gato alimentos poco a poco, especialmente alimentos de fácil digestión y muy palatables. Si el gato es rehacio a comer y los estimulantes del apetito no se recomiendan o son inefectivos se les debe alimentar mediante una sonda.

Te dejamos el siguiente artículo sobre Mi gato no come, ¿qué hago? para que tengas más información sobre el tema.

Los gatos con gastritis o inflamación de la mucosa del estómago, que es la capa que reviste el interior del órgano y lo protege de los flujos gástricos, también suelen vomitar amarillo. Las causas de esta inflamación en los gatos son:

• Ingestión de alimentos en mal estado
• Intolerancias
• Tóxicos o plantas tóxicas
• Estrés
• Cuerpos extraños
• Parasitosis
• Enfermedad renal
• Algunos virus
• Bacteria helicobacter pylori

Además de los vómitos de color amarillo, los gatos con gastritis presentan con frecuencia hipersalivación, náuseas y arcadas además de dolor abdominal, anorexia y deshidratación.

Tratamiento de la gastritis en gatos

En las gastritis más agudas es conveniente que el estómago descanse para que se pueda recuperar la mucosa, por lo que un ayuno de hasta 24 horas puede ser efectivo. Pasado ese tiempo debe comenzar a ingerir líquidos y probar con dieta húmeda. También puede ser recomendable añadir protectores de la mucosa gástrica, inhibidores de la producción de ácidos gástricos y antieméticos a fin de reducir la inflamación y la irritación del estómago.

La pancreatitis es la inflamación del páncreas del gato, siendo en esta especie más frecuente la forma crónica que la aguda y cursa con sintomatología muy desapercibida o poco clara que las hacen estar infradiagnosticadas en los gatos. Las principales causas de pancreatitis en los gatos son las siguientes:

• Triaditis feilina.
• Fármacos: organofosforados, azatioprina, L-Asparaginasa.
• Toxoplasma gondii.
• Calicivirus hipervirulento.
• Peritonitis Infecciosa Felina.
• Parvovirus felino.
• Razas de pelo corto: como los siameses.
• Reflujo frecuente.
• Hipercalcemia.
• Hipotensión.
• Traumatismos.
• Adenocarcinomas.

Entre los síntomas a destacar podemos encontrar vómitos biliosos (amarillentos), dolor abdominal, diarrea, anorexia, letargia, pérdida de peso, deshidratación y fiebre.

Tratamiento de la pancreatitis felina

La terapia de la pancreatitis felina consiste en corregir la deshidratación y la hipotensión para mantener el buen estado orgánico mediante fluidoterapia con cristaloides o coloides en los casos en los que no mejore la hipotensión. Se debe controlar el dolor o prevenirlo con opiáceos como:

• Fentanilo
• Butorfanol
• Buprenorfina

También es importante un buen control de las náuseas y los vómitos mediante antieméticos y se debe corregir la hipocalcemia de forma rápida con gluconato de calcio. En casos de sospecha de Toxoplasma gondii se deberán añadir antibióticos. Si hay triaditis el uso de corticoides puede ser necesario, pero nunca usarlos si el gato también tiene diabetes mellitus excepto en casos excepcionales.

Si quieres saber más sobre la Pancreatitis en gatos, no dudes en echarle un vistazo al siguiente artículo de SoyUnGato.

El hígado es el órgano que fabrica la bilis, la que le da el color amarillento a los vómitos, por lo que cualquier problema en este órgano puede alterar su producción, aumentándola y acumulándola en el estómago lo que acaba irritando y produciendo vómitos. Entre los problemas que pueden causar esto encontramos las colangitis o inflamación de la vesícula biliar y la insuficiencia hepática que consiste en un fallo en el correcto funcionamiento del órgano por diferentes causas como lipidosis, tumores o inflamaciones.

Los signos clínicos que tendrá un gato con estos problemas pueden ser los siguientes:

• Vómitos
• Pérdida de peso
• Letargia
• Inapetencia
• Ascitis
• Anorexia
• Depresión
• Ictericia
• Diarrea
• Polidipsia

Tratamiento de la enfermedad hepática felina

Se deberá tratar de forma específica la enfermedad en cuestión, por ejemplo:

• En la lipidosis: se deberá utilizar la nutrición enteral con una sonda, añadir fluidoterapia con cristaloides isotónicos con potasio si les necesario, dar suplementos vitamínicos y nutricionales con taurina, L-carnitina, vitaminas E , B y K. Añadir lactulosa si hay encefalopatía hepática y para proteger la oxidación y reponer las reservas de glutatión, se debe administrar N-acetil-cisteína intravenoso de forma lenta.
• En las colangitis neutrofílicas: se deben dar antibióticos durante 4-6 semanas con un cultivo y antibiograma previos y ácido ursodesoxicólico para estimular la secreción de bilis siempre que no exista obstrucción, así como antioxidantes como S-Adenosil metionina (SAMe) y la vitamina E.
• En las colangitis linfociticas: además se debe administrar prednisolona a dosis altas (2-3 mg/kg/24 horas) con reducción progresiva de la dosis.
• En los tumores: se deberá usar quimioterapia y extirpación en los casos posibles.

En estas enfermedades también es conveniente el uso de antieméticos, protectores gástricos, estimulantes del apetito y buprenorfina para controlar el dolor si hay pancreatitis asociada.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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