Sarcomas en gatos: tipos, síntomas y tratamientos

Sarcomas en gatos: tipos, síntomas y tratamientos
Imagen: avepa.org

¿Cómo saber si mi gato tiene un sarcoma? Los sarcomas son unos tumores subcutáneos malignos que conforman unas masas firmes que aumentan de tamaño de forma progresiva. Se trata de unas neoplasias muy invasivas, originadas en el tejido mesenquimal, que se extienden con una gran magnitud en los tejidos circundantes y tienen potencial de realizar metástasis por vía sanguínea. El tratamiento consiste en una combinación de cirugía con amplios márgenes de extirpación y quimioterapia/radioterapia, pero el pronóstico es reservado y variable entre el tipo de sarcoma, la extensión y la localización.

Si te interesa saber más sobre los sarcomas en gatos continúa leyendo este artículo de SoyUnGato para conocer qué son estos tumores, qué tipos hay, que síntomas producen, cómo se diagnostican y cómo se deben tratar.

Qué es un sarcoma en gatos

Los sarcomas son un grupo de tumores originados en el tejido mesenquimal con características clínicas, biológicas y morfológicas similares entre sí, tanto macroscópica como microscópicamente.

Los sarcomas constituyen el 7 % de todos los tumores de piel en los gatos y se originan en el tejido subcutáneo de forma constante y progresiva, lo que los hace alcanzar un gran tamaño. Muchas veces se ulceran por el roce y pueden desarrollar necrosis central. Ambas situaciones hacen que se infecten con mucha probabilidad y que incluso sean foco de infestaciones de larvas de mosca (miasis cutáneas).

Aunque pueden estar localizados en múltiples puntos, se suelen encontrar en las extremidades, el flanco, el dorso, el vientre o el lomo de los gatos. Pueden producir metástasis al ser tumores malignos, realizándola por vía sanguínea sin afectar al nódulo linfático regional.

Tipos de sarcomas en gatos

Podemos encontrar varios tipos de sarcomas de tejidos blandos en los gatos, destacando los siguientes:

  • Fibrosarcoma o sarcoma en el punto de inyección, frecuentemente asociado a la vacunación.
  • Hemangiopericitoma.
  • Liposarcoma.
  • Neurofibrosarcoma/schwannoma o tumor de vaina nerviosa periférica.
  • Histiocitoma fibroso maligno.
  • Rabdomiosarcoma y leiomiosarcoma o sarcomas originado en los músculos estriado y liso, respectivamente.
  • Mixosarcoma.
  • Linfangiosarcoma: los originados en los vasos linfáticos.
  • Liposarcoma.
  • Mesenquimoma maligno.
  • Sarcoma de células sinoviales.

Es decir, generalmente los sarcomas de tejidos blandos se forman a partir de tejido mesenquimal del músculo, sistema nervioso, sistema vascular, tejido fibroso o adiposo. Sin embargo, también los sarcomas pueden afectar a los tejidos duros u óseos, es decir, los huesos, denominados en estos casos osteosarcomas. Estos tumores óseos se suelen ver en las extremidades, cursando con mucho dolor e incluso fracturas y cojeras en los gatos afectados.

Pese a que existen numerosos tipos, en general todos son tumores de consistencia dura, infiltrativos localmente, recidivantes aún con cirugía, poco metastásicos y de lento crecimiento, pero que pueden alcanzar un gran tamaño y extensión.

Síntomas de sarcomas en gatos

La sintomatología de los sarcomas en los gatos es variada debido a la gran variedad de localizaciones que pueden presentar estos tumores, aunque todos coinciden en que son masas consistentes de lento crecimiento, irregulares, lobuladas y adheridas de manera fuerte al tejido subyacente o piel.

Por ejemplo, los sarcomas musculares en las patas harán que tu pequeño felino tenga dolor y dificultades al caminar o cojeras, mientras que los que se forman en el tejido nervioso provocarán signos neurológicos. En general, los sarcomas en gatos pueden dar lugar a los siguientes signos clínicos de debilidad:

  • Masas, nódulos o bultos palpables.
  • Anorexia o pérdida de apetito.
  • Pérdida de peso.
  • Decaimiento.
  • Dolor.
  • Mal aspecto del pelo y caída del mismo.
  • Ulceraciones del tumor o daños en el mismo por golpes o autotraumatismos.
  • Diarrea.
  • Vómitos.

Los osteosarcomas pueden producir también cojeras y dolor, pero al dañar tanto el hueso pueden fracturarlo, haciendo evidente la sintomatología en el gato.

Imagen: histopatovet.com

Causas de sarcomas en gatos

Los sarcomas felinos, como el resto de tumores, suelen aparecer de forma secundaria a mutaciones genéticas, aunque algunos como el fibrosarcoma o el sarcoma en el punto de inyección tienen una clara causa, la vacunación en los gatos, generalmente con vacunas con coadyuvantes como las de la leucemia felina o las de la rabia. Esto se produce cuando no desaparece el pequeño foco inflamatorio que queda tras la aplicación de la vacuna en unas tres semanas, sino que se vuelve crónica e induce la modificación celular y la aparición de este tumor agresivo. Este tumor también se ha relacionado con el virus del sarcoma felino, que es derivado del de la leucemia felina, y tras la aplicación de microchips, antibióticos de efecto prolongado o lufenurón.

La edad también juega un papel clave en el desarrollo de tumores en los gatos, así como la predisposición genética y racial que tenga el gato afectado.

Diagnóstico de sarcomas en gatos

Para poder diagnosticar estos tumores es necesario tomar una muestra para citología e histología mediante la punción-aspiración con aguja fina (PAAF). Es importante no tomar muestras de la zona ulcerada si el tumor está ulcerado y es normal que estos tumores sangren al introducir la aguja para la obtención de células. Al ser unos tumores menos exfoliativos que los tumores de células redondas o epiteliales, puede ser una buena idea utilizar una aguja más gorda para conseguir un mayor número de células; se recomienda realizar 3 o 4 punciones con aguja fina y el mismo número con aguja gruesa.

Al microscopio, se observará una baja celularidad, con células aisladas, carentes de desmosomas, con límites difusos citoplasmáticos o redondeadas con nucléolos polimórficos y con uno o más núcleos. Si se trata de un lipoma, se observan adipocitos y gotas lipídicas con núcleos pequeños y citoplasmas pálidos.

Para diagnosticar un sarcoma en el punto de inyección felino se debe tomar una muestra con biopsia en cuña y analizarla histológicamente, observando un componente inflamatorio con fibrosis, grandes necrosis centrales, células mononucleares y granulación.

Es importante también conocer si el tumor ha producido metástasis en los gatos, realizando ecografias de tórax para observar el estado de los principales órganos como los pulmones.

Tratamiento para los sarcomas en gatos

Es importante estimar en qué estadio se encuentra el tumor, encontrando 5 de menor a mayor gravedad y extensión. No obstante, el primer tratamiento de estos tumores es siempre la cirugía, es decir, la remoción o extirpación del sarcoma. Siempre va a ser necesario eliminar el tumor con amplios márgenes quirúrgicos, ya que los sarcomas en gatos suelen ser recidivantes si no se extirpan más de lo que se ve a simple vista debido a que quedan células neoplásicas en los tejidos circundantes aunque no se vean. Es decir, además del tumor, se deben extirpar los músculos y fascias adyacentes al mismo, recomendándose unos 3-5 cm en los laterales y profundidad del tumor. Sin embargo, esto no siempre puede ser posible. Por ejemplo, en los sarcomas asociados al punto de inyección interescapulares es imposible retirar todo lo necesario para evitar que vuelva a salir, en cambio, en localizaciones como las extremidades o en la pared abdominal lateral tras las costillas sí se podría realizar con mayor seguridad.

Tras la cirugía suele ser necesaria la radioterapia para controlar el crecimiento del tumor, especialmente si no se ha extirpado de forma completa o hay riesgo elevado de recidivas. En cambio, la quimioterapia no suele ser efectiva (menos del 15 %), teniendo algo más de utilidad en los sarcomas asociados a la vacunación.

Pronóstico de los sarcomas en gatos

El pronóstico de este tipo de tumores suele ser reservado debido a que son muy variados, al riesgo de metástasis y a que no siempre es posible extirpar todo lo necesario. Por ello, en algunos casos es favorable, mientras que en otros no.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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Bibliografía
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  • Galán, A.; Villalobos, C. M. (2005). Fibrosarcoma felino asociado a vacunas e inyecciones terapéuticas. Disponible en: https://www.portalveterinaria.com/animales-de-compania/articulos/16912/fibrosarcoma-felino-asociado-a-vacunas-e-inyecciones-terapeuticas.html