Remedios caseros para el resfriado en gatos

Remedios caseros para el resfriado en gatos

Los gatos, al igual que las personas, pueden sufrir resfriados, que van a cursar con una sintomatología similar a la nuestra, es decir, básicamente detectaremos secreción nasal, ocular, tos y estornudos. En muchos casos, por suerte, es un trastorno leve, pero, en ocasiones, sobre todo si nuestro gato es muy pequeño, muy mayor o padece ya alguna enfermedad, puede complicarse.

Los signos clínicos que hemos mencionado pueden presentarse de forma leve o más grave, afectando al bienestar del gato y dificultando el desempeño de sus actividades cotidianas, entre las que incluimos comer, beber o asearse. Con independencia del tratamiento que nos paute el veterinario, en casa podemos seguir una serie de remedios caseros para el resfriado en gatos con el objetivo de favorecer su recuperación. Por ello, repasamos en este artículo de SoyUnGato 4 remedios caseros para el resfriado en gatos. ¡No te lo pierdas!

Vapor para mejorar la respiración

Normalmente, un gato con resfriado tendrá secreción nasal, más o menos abundante y de consistencia más acuosa o espesa. La mucosidad dificulta su respiración, interfiere con el sentido del olfato y lo lleva a tragar en repetidas ocasiones. Además, es una secreción que se puede quedar pegada alrededor de los orificios nasales, provocando molestias e incluso causando heridas.

Además del tratamiento que haya prescrito el veterinario, podemos recurrir al vapor para ayudar a que las vías respiratorias se despejen. Una forma sencilla es meter al gato en el baño con nosotros mientras nos damos una ducha bien caliente. De esta manera, respirará el vapor sin darse cuenta, con lo que evitamos que se estrese. Además, si vives en un ambiente seco, puede ser buena idea que utilices un humidificador para ayudar a que las mucosas no se sequen.

Además, te contamos Cuándo y cómo bañar a un gato para que tengas más información sobre el tema.

Agua o suero para ablandar las secreciones

Durante el resfriado es muy habitual que se produzcan secreciones, sobre todo nasales, pero también pueden ser oculares. Es frecuente que acaben por depositarse alrededor de la nariz y de los ojos, formando una costra al endurecerse. Para evitarlo debemos limpiar nariz y/u ojos con frecuencia.

Podemos utilizar un papel suave o un algodón o gasa humedecidos en agua o en suero. También se puede usar manzanilla, aunque no es necesario. Con independencia de que escojas papel, gasa o algodón, usa uno distinto para cada ojo y otro diferente para la nariz. A continuación te dejamos algunas recomendaciones según la dificultad de la costra formada.

  • Si la costra se ha formado: este método también nos puede ayudar a retirarla. Hay que hacerlo para comodidad del gato, pero, también, porque así evitamos que se lesione la piel que está por debajo. Además, ojos y nariz tienen que estar limpios cada vez que administremos medicamentos para que lleguen bien a su objetivo.
  • Si la costra no sale con facilidad: es recomendable que utilicemos agua o suero fisiológico tibios para ayudar a que se ablande. Siempre hay que retirarla con suavidad, con movimientos del interior hacia el exterior y sin frotar, ya que podríamos irritar la piel o incluso hacer herida.

Es probable que el gato enfermo no se acicale, por eso no se va a limpiar estas secreciones él solo y debemos ayudarlo. Igualmente, cualquier otra parte del cuerpo sucia puede limpiarse de manera local utilizando una toallita especial para gatos. No es momento de baños, ya que lo normal es que estresen al animal que, además, corre el riesgo de enfriarse.

Te contamos Cómo limpiar los ojos de un gato con manzanilla en el siguiente artículo de SoyUnGato.

Comida para despertar el apetito

Un gato resfriado puede sentirse mal, decaído, con dolor al tragar, etc., lo que son signos que favorecen la pérdida del apetito. Este aspecto se ve agravado por la presencia de mucosidad nasal, que inutiliza su sentido del olfato, disminuyendo, todavía más, su interés por la comida.

Ante esta situación, es importante que coma y que beba, ya que, de lo contrario, podría deshidratarse, condición que aumenta la anorexia, estableciendo así un círculo vicioso muy perjudicial para la salud del gato, sobre todo si se trata de un ejemplar vulnerable por edad o circunstancias. Por eso debemos animarlo a que coma.

Pero, ¿qué darle a un gato resfriado? Podemos recurrir a sus alimentos favoritos. Por ejemplo:

  • Pollo cocido.
  • Jamón cocido: mejor sin sal y lo más natural posible.
  • Pescado.

También podemos darle los alimentos húmedos que se comercializan para gatos. Los hay específicos para animales convalecientes. Son especialmente palatables y muy nutritivos, con lo que alimentan al gato aunque coma pequeñas cantidades. Además, al ser húmedos, nos sirven para mantener una correcta hidratación, pues, si el gato no quiere comer, puede ser todavía más difícil que beba.

En este punto podemos ofrecerle caldo, mejor casero y sin sal ni grasas, o añadirle agua o caldo a su comida para hacer nuestra propia pasta húmeda, a modo de puré, que, además, se traga con mayor facilidad. Hay que tener en cuenta que es posible que le duela la garganta. Esta opción, así como las latas de restablecimiento, se podría convertir en alimento líquido, simplemente agregando más agua.

De esta forma, podremos alimentar con jeringuilla (pero sin aguja) a los gatos más reacios. Por supuesto, siempre por el lateral de la boca, poniendo la jeringa detrás del colmillo y administrando una pequeña cantidad y no más hasta que haya tragado.

A veces ayuda a que coma mancharle con el alimento el hocico (no si tiene secreciones), la boca o una pata, si no ha perdido el deseo de asearse. Es importante, también, ofrecerle la comida tibia, ya que es una forma de potenciar el aroma, y darle pequeñas raciones cada pocas horas.

Te damos más detalles sobre Cómo alimentar a un gato enfermo en el siguiente post.

Fortaleciendo su sistema inmune

Por último, los resfriados suelen estar provocados por un virus, lo que quiere decir que no habrá un tratamiento para ellos, pero sí podremos ayudar a que el sistema inmune del gato esté más fuerte para combatirlos. Los cuidados que hemos indicado más el tratamiento pautado por el veterinario son la mejor ayuda.

Además, asegúrate de que la comida que le das es de calidad y mantenlo lejos de cualquier desencadenante de estrés, pues se sabe que este afecta también a la fortaleza del sistema inmune. Por otra parte:

  • Mantén la casa a una buena temperatura y sin corrientes de aire.
  • Ofrécele al gato una cama confortable en un lugar tranquilo y cálido: ya que el buen descanso es otra de las claves de la recuperación.

En definitiva, nuestros cuidados son el mejor tratamiento casero para el resfriado en gatos.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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