Por qué mi gato me muerde los pies

Por qué mi gato me muerde los pies

Si convives con un gato, es probable que su comportamiento te haya sorprendido en más de una ocasión. Y es que el código de comunicación felino no siempre es algo sencillo de descifrar. Cuando un gato muerde, tendemos a creer que se trata de un trastorno de conducta y que la agresividad es su causa. Sin embargo, no siempre es así. De hecho, en esta entrada de SoyUnGato descubrirás por qué mi gato me muerde los pies.

La motivación de la mordedura de un gato nunca es casual. Tu minino trata de llamar tu atención para conseguir una determinada acción por tu parte. Saber interpretarlo y actuar en la dirección correcta será crucial para reforzar vuestro vínculo y contribuir a su salud mental y emocional. Si continúas a nuestro lado, sabrás qué significa que mi gato me muerda los pies y cómo proceder en cada caso.

Está aburrido

La falta de estimulación copa el 80% de las ocasiones en las que el minino muerde los pies, los tobillos o las piernas de su tutor (o de algún miembro de la familia). La frustración que siente por no poder dar salida a su energía, física y mental, lo lleva a morder aquello que le queda más cercano. No es una situación alarmante, pero requiere que intervengas cuanto antes para evitar que se agrave o cronifique.

Desde SoyUnGato damos mucha importancia al enriquecimiento ambiental, y es que la disponibilidad de rascadores, árboles o gimnasios para gatos de distintas alturas, con o sin accesorios, de refugios, como una humilde caja de cartón, y de juguetes de su agrado es determinante para la salud psicológica del gato, especialmente si debes ausentarte durante muchas horas y se queda solo.

Debes dedicar tiempo a diario a estar con él y a jugar, al menos, 5 minutos. El juego compartido le sirve para moverse, y prevenir el sobrepeso, para desfogarse, pero también para sentirse acompañado. Los juegos que apelan a su instinto de caza son especialmente recomendables. Si no dispones de tiempo, aprovecha los ratos que destinas a su higiene para hacerle compañía y plantéate acoger otro gato realizando una correcta presentación.

No dudes en echarle un vistazo al siguiente artículo sobre Cómo jugar con un gato.

No está correctamente socializado

En otras ocasiones, la razón que explica por qué me muerde mi gato radica en su falta de socialización, bien porque no se abordó en su debido momento, entre la tercera y la novena semana de vida, o porque se llevó a cabo de forma errónea, por ejemplo, separándolo antes de las 8 semanas de su madre y hermanos. De adultos pueden presentar dificultades para la interacción social y llamar la atención, para que les hagan caso, mordiendo.

Desde SoyUnGato te aconsejamos que seas muy paciente con tu minino y que no lo castigues ni regañes cuando te muerde los pies. Para que comprenda que con esta conducta no va a conseguir tu atención, levántate e ignóralo. Si mantienes esta actitud cada vez que muerde, dejará de hacerlo al cabo de pocas semanas. Si, por el contrario, persiste, no demores la visita a un etólogo felino para que te oriente sobre qué hacer.

Se siente molesto o vulnerable

La pérdida de control que les genera cualquier cambio en sus rutinas es otra de las explicaciones de por qué los gatos muerden. La llegada de un bebé a casa, una mudanza o una visita inesperada los exponen a nuevos olores, sonidos y situaciones que hacen tambalear su status quo. Algo que, por definición, estresa a los gatos porque los lleva a competir por los recursos, especialmente por tu atención.

Si se ha producido alguna novedad en vuestra vida, es probable que tu gato muerda para manifestar su estrés o ansiedad. Sé paciente y dale margen para que vaya asimilando la situación. Valerte de las feromonas de apaciguamiento puede ser adecuado para rebajar su irascibilidad. Si consideras que ha transcurrido tiempo sin que se produzcan mejoras, consúltalo con el veterinario.

Te contamos más sobre el Estrés en gatos: síntomas y tratamiento en el siguiente post de SoyUnGato.

Está sobreexcitado

Cuando un gato muerde los pies no siempre es debido a aburrimiento o a estrés. Reparando en la situación, puede deberse a todo lo contrario. ¿Alguna vez tu minino te ha lamido y acto seguido te ha mordido? Es una clara muestra de emoción y sobreexcitación. Disfruta tanto del tiempo de juego contigo o le hace tan feliz esa comida que le has ofrecido que no puede evitar morderte para expresar, con efusividad, su afecto y agradecimiento.

Si lo hace tan fuerte que te causa dolor o no deseas reforzar esta conducta, recuerda mantenerse indiferente y no acariciarle ni hablarle de forma cariñosa cuando se comporta así. Si lo ves oportuno, aléjate y sé cariñoso solo cuando se haya calmado. No tardará en comprender la asociación y dejará de hacerlo. Cuando así sea, refuérzalo con aquello que más le guste.

Está agresivo

Aunque sea en un bajo porcentaje, que tu gato te muerda los pies puede ser debido a agresividad. Los gatos callejeros son especialmente esquivos o desconfiados por las condiciones de vida a las que están acostumbrados. Si acabas de acoger a uno, no desesperes y dale tiempo. No fuerces su acercamiento y ofrécele todo cuanto necesita (comida, agua, una cama, rascadores, juguetes, higiene y cariño) para que se sienta en casa.

Si, por el contrario, el detonante es que has acogido a otro gato que no acepta, evita que rivalicen por los recursos. La competencia hace aflorar sus miedos e inseguridades y no es de extrañar que recurran a los mordiscos para hacerse valer. Realizar una paulatina presentación siempre ayuda a que vayan conociéndose sin sentirse amenazados. La intervención del etólogo es necesaria si este comportamiento se prolonga en el tiempo.

Aquí puedes encontrar más información sobre Cuánto tarda un gato en adaptarse a otro.

Está enfermo

Enfermedades como la insuficiencia renal o las afecciones articulares a las que son especialmente vulnerables los gatos ancianos también dan lugar a los mordiscos. Pese a que consiguen camuflar su malestar, los gatos de cualquier edad pueden manifestar este tipo de conductas cuando el dolor se hace insoportable. Llevarlo sin demora al veterinario será lo idóneo para determinar la causa y establecer el correspondiente tratamiento.

Como ves, en buena parte de las veces la pregunta de por qué mi gato me muerde los pies se responde atendiendo a la falta estimulación o a la necesidad de pasar más tiempo con él. Se trata de una conducta con la que expresan su anhelo de interacción y compañía, y ante la que conviene actuar para prevenir males mayores.

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