Garrapatas en gatos: tipos, síntomas y cómo quitarlas

Las garrapatas son los ácaros de mayor tamaño y de los parásitos externos más habituales en los gatos. Son de hábitos hematófagos, es decir, se alimentan de la sangre de las personas o los animales que parasitan.

Existe una gran variedad de tipos de garrapatas, pero todas suelen tener un color marrón oscuro o negro y tienen una cantidad total de ocho patas que utilizan para adherirse a la piel de los gatos. A su vez, estas garrapatas se pueden dividir en dos tipos: garrapatas duras y garrapatas blandas. Conozcámoslas:

• Garrapatas duras: son las garrapatas más frecuentes, se suelen encontrar en el dorso de los gatos, su caparazón es duro y son de color marrón oscuro.
• Garrapatas blandas: este tipo de garrapatas se localiza en zonas como el interior de las orejas de los gatos y posee un color crema y una textura blanda.

Generalmente, son cuatro las garrapatas que suelen parasitar a nuestros pequeños felinos. En concreto, los tipos de garrapatas en gatos son Rhipicephalus sanguineus, Dermacentor reticulatus, Ixodes ricinus e Ixodes hexagonus.

Si bien las garrapatas realizan un daño directo sobre la piel de nuestros gatos, mientras llevan a cabo su alimentación hematófaga también pueden liberar y contagiar microorganismos y patógenos responsables de enfermedades. Además, mediante su saliva, pueden liberar una potente toxina paralizante que produce relajación muscular ascendente sin fiebre, agotamiento, dolor y dificultad respiratoria.

Las enfermedades transmitidas por garrapatas en gatos son las siguientes:

• Cytauxzoonosis felina o fiebre del gato maltés: causada por Cytauxzoonosis felis, un protozoo de la familia Theileriidae que produce síntomas en los gatos domésticos que consisten en deshidratación, fiebre, ictericia y letargia con alta mortalidad.
• Anaplasmosis: enfermedad causada por Anaplasma phagocytophilum y transmitida por Ixodes ricinus que produce daño en los leucocitos o glóbulos blancos, apareciendo dolor articular y muscular y fiebre debido a la artritis producida en nuestros gatos.
• Tularemia: enfermedad causada por la bacteria Francisella tularensis y que produce fiebre, apatía, úlceras en la lengua y el paladar y anorexia.
• Anemia infecciosa felina: provocada por unas pequeñas bacterias del borde de los glóbulos rojos: Mycoplasma haemofelis, Candidatus Mycoplasma haematoparvum y Candidatus Mycoplasma turicensis. La primera de ellas es la más patógena, produciendo una gran anemia con un descenso acusado del hematocrito de nuestros pequeños felinos.
• Bartonelosis: enfermedad bacteriana causada por Bartonella henselae que, aparte de mediante pulgas, parece que también se puede transmitir por garrapatas e incluso se puede contagiar a las personas, causando la "enfermedad del arañazo del gato". Generalmente, los gatos son subclínicos, aunque algunos pueden manifestar fiebre, miocarditis, nefritis, dolores musculares, alteraciones neurológicas o reproductivas.

Como hemos comentado, las garrapatas son unos pequeños arácnidos que se alimentan de sangre del gato parasitado para obtener todos los nutrientes que necesitan para su supervivencia y reproducción, completando así su ciclo de vida. Dependiendo de si son garrapatas duras o blandas, se localizarán en unas u otras zonas del cuerpo de nuestros gatos.

Por ejemplo, es más frecuente que detectemos que nuestro gato tiene garrapatas si observamos heridas y parásitos oscuros en zonas como el lomo o abdomen, frecuentemente asociadas a garrapatas duras como las del género Rhipicehpahlus. En otros casos, las garrapatas no se encuentran en el cuerpo del gato sino en la cabeza, en concreto, en la zona de las orejas, como sucede con la garrapata Otobius megnini, que es blanda y de color cremoso, o en los párpados. Así mismo, es común encontrarlas en otras zonas con poco pelo o la piel más fina, como el cuello, entre los dedos, las ingles y la zona perianal. Ahora que sabes dónde encontrar garrapatas en gatos, no dudes en examinar estas zonas cada vez que salga al exterior o tú vuelvas de zonas donde puedan estar.

Huevos de garrapatas en gatos

En un mismo gato pueden coexistir garrapatas en sus tres fases del ciclo de vida: larvas, ninfas y adultas, pero también sus huevos. Generalmente, se encuentran los huevos y las fases más jóvenes (larvas y ninfas) en la zona dorsal donde la piel es más firme y gruesa, y las garrapatas adultas en regiones como el cuello, las patas y la zona perianal.

Así pues, a la hora de buscar garrapatas en gatos y sus huevos, es fundamental repasar todas las zonas mencionadas, ya que suelen ser las favoritas de estos parásitos.

Si tu gato tiene garrapatas posiblemente tú también recibas alguna picadura de las mismas, pero eso no significa que te vayas a quedar repleto de todas ellas. Además, las garrapatas pueden transmitir enfermedades que tu gato puede también transmitirte a ti, como la enfermedad del arañazo del gato. Por todo ello, es importante que, si detectas que tu gato tiene garrapatas, hagas algo enseguida, pues en un centro veterinario le podrán poner el mejor tratamiento para acabar con estos molestos parásitos y evitar sus daños directos e indirectos.

Si quieres saber cómo quitar garrapatas en gatos, debes conocer que puedes retirarlas tú mismo, pero eso sí, debes saber cómo hacerlo. Debes tener a mano unas pequeñas pinzas para su extracción, nunca debes retirar la garrapata directamente con tus manos ni con otros objetos. Debes saber que la extracción de la garrapata debe ser completa, si no se realiza correctamente, muchas veces, la cabeza o las piezas bucales quedan en el interior de la piel del gato, continuando su acción irritativa a la vez que favoreciendo el riesgo de infección. Por este motivo, debes seguir estos pasos para sacar una garrapata de tu gato:

1. Pega la pinza a la piel del gato lo más cerca posible de la boca de la garrapata.
2. Extráela con delicadeza y poco a poco para evitar que la cabeza se desprenda y quede dentro.
3. Si aún así no consigues extraer adecuadamente la garrapata, puedes aplicar una fina capa de vinagre de manzana o aceite de oliva con una gasa y esperar unos segundos para ver si la garrapata se despega sola.

Además, para eliminar las garrapatas en gatos, sobre todo cuando son muchas, se deben utilizar fármacos con potencial antiparasitario acaricida como el Fluralaner. Eso sí, el medicamento para garrapatas en gatos cuando son infestaciones muy graves, lo recetará y aplicará el veterinario.

Además, en este otro artículo compartimos Los mejores remedios caseros para eliminar garrapatas en gatos.

Desinfecta el ambiente

Además de eliminar las garrapatas de tu gato deberás desinfectar muy bien tu hogar y todos los objetos que han tenido contacto con el minino. Esto es importante porque las garrapatas pueden sobrevivir en el ambiente y parasitar de nuevo a tu gato u a otro miembro del hogar.

La mejor forma de evitar que tu gato tenga garrapatas es llevando a cabo una buena medicina preventiva antiparasitaria con el uso de fármacos que las repelen o desparasitan al animal cada poco tiempo. Estos productos los podemos encontrar en forma de espráis, comprimidos, pipetas o collares antiparasitarios y son muy efectivos para prevenir estos parásitos y otros que afectan a nuestros pequeños felinos.

Además, debes evitar que tu gato salga al exterior, especialmente si son zonas de hierba alta entre la primavera y el invierno, época donde estos parásitos proliferan y, por ende, están mucho más presentes. En caso de que necesite salir sí o sí, es importante vigilarlo y, sobre todo, explorar todo su cuerpo para comprobar si tiene o no alguna garrapata.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

Si deseas leer más artículos parecidos a Garrapatas en gatos: tipos, síntomas y cómo quitarlas, te recomendamos que entres en nuestra sección de Desparasitación.