Las mejores fuentes para gatos

Las fuentes bebederas para gatos de acero inoxidable tienen la ventaja de estar fabricadas en un material resistente, lo que se traduce en una larga vida útil. Por otro lado, el acero inoxidable evita que el agua del bebedero se estanque, por lo que también evitará que surjan bacteria o virus que puedan dañar la salud de tu pequeño peludo.

Otra de las ventajas de esta fuente para gatos de acero inoxidable es que es fácil de limpiar, ya que el material es apto para lavavajillas incluso. Por todo ello, suele ser un material bien aceptado por la generalidad de los felinos. Además, minimiza las salpicaduras, algo que tu gato agradecerá al evitarle mojarse las patitas al beber.

Al carecer de cables, este tipo de fuente bebedera para gatos resulta idónea para llevar de viaje. Son compactas y portátiles, por lo que, aunque no la uses solo para irte de vacaciones, gracias a ella tendrás la certeza de que tu felino no corre riesgo de quedar atrapado entre los cables o de sufrir caídas debido a ellos. Por lo general, suelen estar hechas de plástico libre de BPA. Además, muchas de ellas cuentan con materiales translúcidos para que se vea el consumo total de agua por parte del gato. Como ventaja, son fáciles de limpiar y muy duraderos, por lo que tu gato podrá estar bien satisfecho e hidratado.

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En este caso, nos referimos a bebederos para gatos provistos de un tanque, que alberga el agua, y de un mecanismo que la dirige hasta la bandeja desde la que bebe el animal. Son fuentes para gatos baratas, porque están hechas de plástico y carecen de sensor de movimiento y de filtro para depurar el agua. Aunque son más sencillas, resultan igualmente efectivas para contribuir a la hidratación y al enriquecimiento ambiental del felino.

Al igual que las fuentes de acero inoxidable, las de cerámica son pesadas y resistentes. Por tanto, te despreocupas de que tu gato tire el agua y de tener que sustituirla por otra nueva a los pocos años. Es un material bien aceptado por los gatos y con un marcado componente estético, además de que puede ser lavada en el lavavajillas. De hecho, este aspecto encarece su precio, habida cuenta de que consigue embellecer el espacio en el que es colocada.

Esta modalidad de fuente de agua para gatos es ligera y económica, tanto desde el punto de vista del precio de compra como de su consumo energético. Pueden disponer de distintas alturas, convirtiéndolas en una interesante alternativa si convives con un gato anciano o con problemas articulares, como la artrosis, o si lo que te interesa es añadir más recursos para su hidratación (para ubicarla en otra estancia de la casa).

Esta fuente bebedera para gatos es una de las más recomendadas por los etólogos, ya que les incita a acercarse a beber atraídos por el fluir del agua. No has de olvidar que llevan grabado en su ADN esa fascinación por las cascadas y los arroyos en los que el agua transcurre. Existen modelos más o menos sofisticados, siendo los que activan el chorro al detectar la proximidad del minino los de menor consumo energético.

Dentro de las fuentes para gatos baratas, de plástico, las decoradas con una flor resultan graciosas y llamativas a partes iguales. Lucen una gran margarita que hace las veces de grifo y, gracias a sus diferentes difusores, permiten ajustar la potencia del chorro, algo que resulta de utilidad si conviven varios gatos en casa. Algunos modelos constan de una luz led que te alerta de la necesidad de reponer el agua.

Junto a las provistas de sensor de movimiento, las fuentes para gatos con un buen sistema de filtrado son las que más recomendamos desde SoyUnGato. No en vano, dicho sistema es el encargado de prevenir los malos olores, de purificar el agua y de mantenerla siempre fresca. Al acostumbrado carbón activo, pueden acompañarle una malla de algodón y la resina de intercambio iónico para optimizar la calidad del agua.

Se trata de la variante más básica de las fuentes para gatos sin cables. Suelen tener una placa flotante que controla de forma automática la salida de agua cada vez que el gato bebe, por lo que es antiderrames.

Además de permitirte bloquear la salida del agua, sus paredes son gruesas y actúan como un termo, manteniéndola siempre fresca, algo que, como sabes, es una característica que los mininos valoran positivamente cuando se trata del agua. Carecen de motor, por lo que su consumo energético es nulo.

La capacidad del depósito es otro aspecto a valorar si te estás planteando adquirir una fuente para tu gato, por ejemplo, como juguete de Navidad. Si el sistema de filtrado es de calidad, cuanta más agua albergue, por más tiempo podrás despreocuparte de las labores de mantenimiento para reponerla. Las mejores fuentes para gatos rondan los 2-6 litros, siendo menos aconsejables las que presentan una capacidad inferior a los 2 litros.

Las anteriores tienen una capacidad aproximada de 2 litros, por ello ahora te presentamos una con una capacidad superior, de 3 litros. Revisa todas las fuentes para gatos que hemos seleccionado como las mejores y escoge la que mejor se adapte a tu minino.

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