Cosas que perciben los gatos en las personas

Cuando un gato te elige no es casual. Siempre desde su temperamento y bagaje particular, los gatos tienden a decantarse, como humano de referencia, por la persona que comparte sus modos de comportarse y de comunicarse. Así, si se trata de un persa o de un chartreux que, per se, gustan de la vida contemplativa y silenciosa, sentirán afinidad por la persona que hable en voz baja y se muestre calmada en sus interacciones.

Si vuestro vínculo está bien establecido y cuidado, tu gato sabrá identificar tu estado de ánimo y actuará en consecuencia. Las etólogas Moriah Galvan y Jennifer Vonk, de la Universidad de Oakland, han llegado a la conclusión de que los felinos son empáticos con sus tutores. Así, lo han argumentado en su artículo Animal Cognition^[1]. La justificación no es otra que la preservación de su estabilidad emocional.

Si estás triste, tu postura y tus sonidos variarán y tu gato se verá obligado a reconfortarte para que vuelvas a sentirte alegre (y sigas cuidando de él). Por contra, querrá participar de tu euforia y es natural que eleve la cola, dilate las pupilas y que sus orejas también luzcan erguidas. En el caso de que estés enfadado, tratará de mantenerse al margen (tal y como haría con sus congéneres en una situación similar).

Algunas culturas orientales lo manifiestan desde hace miles de años. Según estas culturas, los gatos están conectados con el más allá y perciben las energías de su entorno continuamente. Así, no es de extrañar que tras un largo día caminando tu gato decida acurrucarse y quedarse dormido sobre tus pies o que te amase, mientras ronronea, tu espalda dolorida. Captan las energías que no fluyen de forma natural y actúan como catalizadores para revertir la situación.

Esta misma capacidad aplica a los electrodomésticos. En este sentido, puedes toparte con tu gato dormido sobre el mando de la televisión, sobre una tablet o el teclado del ordenador. Su sensibilidad les lleva a realizar sus siestas en lugares aparentemente poco convenientes por parecernos poco confortables. En el fondo, buscan restablecer el flujo energético para el bien que quienes habitan ese hogar.

Otra de las cosas que perciben los gatos de las personas son las posibles enfermedades. Su acusado sentido del olfato, su sentido estrella, les permite recabar información que no está a nuestro alcance. Son capaces de identificar que tu temperatura corporal se ha elevado y tienes fiebre o que una persona es diabética por su aliento. Se percatará, por tu lenguaje corporal, de que sientes dolor y se tumbará sobre ti. Por ejemplo, si tienes molestias menstruales, tratará de reconfortarte con su calor tumbándose sobre tu vientre.

Las personas moribundas concentran grandes cantidades de cetonas. Estas, a su vez, desprenden un característico aroma, imperceptible para los humanos, pero muy fácil de detectar para los felinos. Por tanto, no es descabellado afirmar que los gatos puede "predecir" el fallecimiento de una persona. Ya existen antecedentes al respecto. El gato Óscar se hizo popular por este "don" en 2007.

Vivía en un hospital y solo accedía a las habitaciones de las personas que al día siguiente morían. El suceso fue publicado en la revista científica New England Journal of Medicine y causó cierta polémica. En los países asiáticos esta polémica no tiene cabida, los gatos son considerados animales místicos, casi divinos, y se les atribuyen propiedades protectoras. Estas culturas tienen más que asumida la conexión de los gatos con todo lo espiritual.

Si te preguntas qué perciben los gatos en las personas, este punto es inequívoco. Nos referimos al reconocimiento de su humano favorito. Saben quién los quiere y quién no. Les resulta innato reconocer y vincularse a la persona que los colma de atenciones. Y no solo apuntamos a las necesidades más básicas, sino al tono de voz empleado para interactuar con él y al tiempo dedicado tanto a prestarle compañía como al juego compartido.

"¿Los gatos reconocen a las personas?" Te dejamos la respuesta a esta duda en el siguiente artículo de SoyUnGato. ¡No te lo pierdas!

No es exagerado afirmar que los gatos ven el aura de las personas. Al igual que pueden mostrarse celosos si se sienten ignorados o relegados, su sensibilidad les permite discriminar a las personas con energías limpias de las que están imbuidas por energías de menor categoría. ¿Te ha pasado que tu gato ha escapado al instante al recibir una visita en casa? Quizás su energía no era positiva y tu gato tomó precauciones para no enfermar.

Otro de los indicadores más claros de cómo ven los gatos a las personas tiene que ver con los cambios de rutina. Tu gato conoce al detalle, no solo cuál es tu estado de ánimo, sino si debe, o no, ponerse en alerta si tus dinámicas más cotidianas no se producen de la manera habitual. Son observadores rigurosos y poseen una memoria robusta para almacenar esta información, sensible para ellos, ya que de ella depende su bienestar.

Al igual que los cambios de rutina, que tanto los estresan, los nuevos olores o los muy fuertes (como los de los cítricos, los perfumes y los limpiadores muy abrasivos) les resultan incómodos y procuran esquivarlos. Por tanto, si cambias de fragancia o has estado con alguien que no conoce, tu olor personal se verá alterado y, aparte de detectarlo al momento, no le agradará el hallazgo. Es probable que te evite durante unas horas antes de marcarte.

Te hablamos del "Marcaje en gatos: tipos y qué hacer" a continuación.

En línea con su pericia para observar y escudriñar tu comportamiento, tu gato sabrá si un viaje o una mudanza están al caer. Es muy probable que cambies de lugar objetos, o que tenga accesibles objetos que no había visto antes (porque los vas a necesitar para hacer las maletas). Será inevitable que estés más activo o nervioso. De todo ello se dará perfecta cuenta, puesto que forma parte de las cosas que perciben los gatos en las personas.

En contraposición a la maldad, cuando afirmamos que los gatos ven el aura de las personas, en especial los que no han tenido una buena vida o acumulan malas experiencias, como es el caso de los gatos callejeros, es usual que perciban que una persona es la idónea para ellos y decidan acercarse a ella. Si esta le permite olerle y no fuerza el contacto, habrá constatado que le es afín y, de alguna manera, lo estará eligiendo como posible tutor.

Quizás te interese saber algunas de las "Señales de que tu gato te quiere" en este post de SoyUnGato.

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