Cómo vaciar las glándulas anales de un gato

Cómo vaciar las glándulas anales de un gato

¿Qué pasa si a mi gato le sale algo blanco en el ano? ¿Y si a mi gato le sale moco por el ano? Las glándulas anales o perianales son unos pequeños órganos que se localizan a ambos lados del ano de los gatos. Por lo general, las glándulas anales en gatos pasan desapercibidas pero, en ocasiones, pueden obstruirse o infectarse, causando problemas a nuestro pequeño felino. Aunque sean una parte de su anatomía, dichas glándulas también son una forma de comunicación felina, ya que el olor que secretan sirve de identidad para los gatos. De hecho, aunque se vacían solas cuando los gatos defecan, por situaciones estresantes o de miedo puede obstruirse.

Por ello, en este artículo de SoyUnGato te explicamos qué son estas glándulas anales en gatos, cómo encontrarlas y cómo vaciar las glándulas anales de un gato en casa si fuera necesario para evitarle molestias. ¡Sigue leyendo para poder averiguarlo!

Qué son las glándulas anales en gatos

También conocidas como glándulas perianales, las glándulas anales en gatos son formaciones del tamaño aproximado de una canica que se localizan bajo la piel a ambos lados del ano, en los sacos anales del animal.

Si te estás preguntando por qué a mi gato le sale líquido marrón del ano es porque las glándulas anales segregan un líquido con mal olor, espeso y marrón que, en ocasiones normales, sale al exterior con las heces. Si simplificamos la anatomía del gato y la comparamos con un reloj, donde el ano es el centro, encontramos las glándulas anales entre las cinco y las ocho.

Descubre por qué "Mi gato se lame mucho los genitales: causas" en el siguiente post que te recomendamos y te puede interesar.

Para qué sirven las glándulas anales en gatos

De efecto lubricante, las glándulas anales de gatos pueden tener mal olor, pero siempre deben segregar un contenido líquido amarillento-marrón. Dicho de otra manera, el olor es un olor distintivo de cada individuo y lo utilizan como medio de comunicación. De ahí que alguna vez hayamos podido preguntarnos por qué a mi gata le sale algo blanco de la cola o por qué mi gata bota un líquido amarillento del ano.

Un problema en la eliminación de esta secreción le va a causar al gato dolor, picor y estreñimiento, porque va a resistirse a defecar en un intento de evitar las molestias. En este caso, estaríamos ante una impactación o un saco anal impactado.

Además, puede ser que el contenido se fistulice, es decir, que se cree un nuevo conducto por donde se expulsa esta acumulación o, por el contrario, puede crearse un absceso en el saco anal, por lo que el dolor aumenta. Este absceso no es más que una inflamación llena de pus pero que puede llegar a romperse a través de la piel. En este caso, estaríamos hablando de un problema de las glándulas anales en gatos que requiere intervención veterinaria.

Si el animal sufre episodios recurrentes, tendremos que vaciar los sacos periódicamente. Esto sucede sobre todo en los gatos de más edad. Si no sabes cómo hacerlo no te preocupes, en los siguientes apartados te contamos cómo desinflamar el ano de un gato y algunos otros remedios caseros para las glándulas anales en gatos.

Por qué fallan las glándulas anales del gato

Hay algunos factores que van a predisponer a que las glándulas anales de un gato no se vacíen eficazmente. Entre ellas, destacan las siguientes:

  • Heces demasiado pequeñas, blandas o diarreicas: no van a conseguir comprimir las glándulas anales del gato a su salida. En este caso, habría que averiguar qué es lo que ocasiona este tipo de deposiciones. Puede ser una dieta inadecuada, parásitos en el tracto, enfermedad inflamatoria intestinal (IBD), etc.
  • Problema anatómico: que afecte al conducto de salida de la propia glándula anal del gato, como puede ser un estrechamiento, dificulta la evacuación del líquido.
  • Secreción muy espesa: puede no conseguir fluir al obstruir el orificio de salida.
  • Esfínter anal que no ejerce una presión suficiente: por lo que el líquido no saldrá.

Ahora que ya sabemos qué son las glándulas anales de los gatos y por qué tienen mal olor, vamos a conocer cómo identificar unas glándulas anales de gato infectadas.

Cómo identificar un problema en las glándulas anales del gato

El acúmulo de líquido en los sacos o su infección causa molestias al gato. Por ello, tenemos que estar pendientes a cualquier alteración de la conducta de nuestro pequeño felino, ya que son perfectos ocultando las molestias. Podríamos encontrarnos ante una obstrucción de las glándulas anales en gatos o una infección si vemos los siguientes síntomas:

  • Lamido de la zona de forma muy consistente: es una forma típica de intentar aliviar el dolor y la molestia que le provoca.
  • Arrastrar el ano por el suelo: otro comportamiento común en gatos con problemas de glándulas anales es que, el mismo felino, intentará morderse la cola, por lo que podemos ver como da vueltas sobre sí mismo. Es normal que lo haga ya que está intentando vaciar sus glándulas.
  • Ausencia de deposiciones y estreñimiento: si notamos que nuestro gato realiza grandes esfuerzos para defecar, probablemente estemos ante un problema en las glándulas anales del gato.
  • Dolor al defecar: es probable que veamos como el gato esconde la cola entre las piernas y, también, se niega a caminar.
  • Mal olor.
  • Enrojecimiento o inflamación de la zona anal.
  • Pus: si se forma un absceso y se abre, veremos pus manchando el pelaje alrededor. Esta secreción tendrá muy mal olor.
  • Fiebre y malestar general: estos problemas por las glándulas anales en gatos solo se dará en aquellos felinos que presenten una infección. También podremos notar apatía y falta de apetito en nuestro pequeño peludo. En el siguiente post de SoyUnGato puedes descubrir "Cómo saber si mi gato está enfermo". ¡No te lo pierdas!

Como ves, si estamos atentos al comportamiento de nuestro compañero, es fácil identificar unas glándulas anales de gato infectadas. Aun así, asegúrate siempre de consultar a un veterinario para que pueda identificar concretamente cuál es la causa que está provocando este unas glándulas anales infectadas en gatos.

Obstrucción de las glándulas anales en gatos

Se dice que estas glándulas anales en gatos están impactadas cuando su secreción no consigue salir al exterior y, por lo tanto, se acumula dentro, aumentándolas de tamaño. Una impactación puede llegar a infectarse, por eso es tan importante tratarla a tiempo y acudir rápido al veterinario.

Suele resolverse vaciando manualmente las glándulas anales del gato. Es un procedimiento sencillo que nos puede enseñar a hacer nuestro veterinario, pero, en estos casos, mejor que sea él quien lo realice, ya que el gato estará muy molesto. También es importante que le ofrezcamos al gato una dieta rica en fibra. Nunca le administraremos laxantes sin prescripción veterinaria.

Ahora que ya sabes cómo se producen las glándulas anales obstruidas en gatos, vamos a ver qué pasa con las glándulas anales del gato infectadas.

Infección en las glándulas anales en gatos

También conocida como saculitis en gatos, la base de esta inflamación es una obstrucción. Una infección puede terminar formando un absceso. El tratamiento va a requerir, además del vaciado manual, la prescripción de antibióticos que podrán administrarse por vía tópica, es decir, directamente en la zona, o sistémica, dando medicación oral.

Puede apreciarse una inflamación, que será dolorosa, en uno o los dos lados del ano. Uno de los remedios caseros para las glándulas anales en gatos infectadas es la aplicación directa de compresas sobre el área afectada un par de veces al día ayuda a aliviar las molestias.

Abscesos de las glándulas anales en gatos

Los abscesos son acumulaciones de pus que se encapsulan bajo la piel y, por ende, van a dar fiebre. Generalmente, suceden tras formarse una impactación y una infección. Algunos se abren solos, eliminando el pus, pero en el resto de casos será el veterinario quien tenga que drenarlos. La piel alrededor se verá roja o morada y en este caso no funciona el vaciado manual de las glándulas anales del gato.

El absceso puede abrirse hacia el interior, formando lo que se denomina una fístula, que complica el cuadro y dificulta su curación. El tratamiento comprende desinfección, antibióticos y antiinflamatorios. Si el gato sufre recaídas será recomendable extirpar las glándulas, lo que se conoce con el nombre de saculectomía.

Aquí tienes más información sobre los "Abscesos en gatos: tipos y tratamiento".

Tumores en las glándulas anales del gato

Un tumor en la zona anal puede crecer hasta comprimir y dificultar el vaciado de las glándulas anales del gato. En estos casos se realiza una biopsia para confirmar el diagnóstico. También se comprueba si hay o no metástasis. Independientemente de si es un tumor benigno o maligno, se suele recurrir a la extirpación de las glándulas anales del gato, sobre todo si hablamos de gatos que presentan infecciones y problemas continuos. Tan solo tu veterinario de confianza podrá hablarte de los beneficios de la cirugía y de cómo se hará.

Cómo vaciar las glándulas anales de un gato

No existen remedios caseros para las glándulas anales en gatos, sino que lo ideal es acudir a tu veterinario/a de confianza para que te explique cómo vaciar las glándulas anales de tu gato. Si esto no es posible por el motivo que sea, te explicamos paso a paso como hacerlo:

  • El primer paso es propiciar un ambiente relajado: asegúrate de que tu gato está tranquilo y acostumbrado a que manipules esa zona de su cuerpo. Para conseguirlo, es preciso tocarla desde pequeño, igual que sus patas y dientes, ya que así dejará que toques cualquiera de estas partes sin ningún problema. Si no es así, necesitarás la ayuda de otra persona.
  • Levanta la cola de tu gato con cuidado: para no hacerle daño. Puedes hacerlo tú o la persona que te ayude.
  • Ubica los sacos anales: palpando ambos lados del ano. Notarás una pequeña bola en cada costado.
  • Coge una gasa limpia y colócala debajo del ano: esto nos servirá para evitar que tu gato se manche al vaciar las glándulas anales.
  • Con tus dedos, presiona suavemente las glándulas anales: hazlo hacia dentro y hacia arriba. Es fundamental hacerlo con cuidado para que tu gato no sienta dolor. El vaciado de las glándulas anales no es doloroso, pero si se presiona demasiado sí puede ser molesto.
  • Verás que por el ano de tu gato sale un líquido más o menos espeso: recógelo con la gasa. Cuando las glándulas estén vacías, dejará de salir líquido.
  • Desinfecta la zona: con suero fisiológico o límpiala con otra gasa humedecida en agua.

Este paso a paso es una forma de aprender cómo vaciar las glándulas anales del gato en casa y de forma completamente segura, siempre y cuando también lo hayamos consultado con nuestro veterinario. Bajo ningún concepto desde SoyUnGato fomentamos la manipulación y extirpación de las glándulas anales del gato sin la previa consulta y diagnóstico de un profesional.

Cómo prevenir problemas en las glándulas anales de los gatos

Para evitar impactaciones que den lugar a infecciones o abscesos, debemos tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Proporcionarle al gato una dieta equilibrada que le ayude a conformar sus deposiciones. Para ello, debe incluir la cantidad suficiente de fibra.
  • Mantener sus desparasitaciones al día.
  • Debemos tratar cualquier causa que pueda predisponer la formación de heces blandas como la enfermedad inflamatoria intestinal, las alergias o las intolerancias alimentarias, etc.
  • Controlar su peso.
  • Si nuestro gato ha tenido algún problema con las glándulas anales, debemos revisar la zona periódicamente para detectar rápido cualquier signo de impactación o infección.

Como hemos mencionado a lo largo del artículo, si notas que tu gato tiene las glándulas anales inflamadas, no dudes en acudir al centro veterinario.

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