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Artrosis en gatos: tratamiento y síntomas

 
Equipo editorial de SoyUnGato
Por Equipo editorial de SoyUnGato. Actualizado: 11 enero 2023
Artrosis en gatos: tratamiento y síntomas

Su instinto de supervivencia los hace especialmente hábiles para enmascarar el dolor y las enfermedades. Por ello, la artrosis en gatos es una patología infradiagnosticada, además de ser una enfermedad sin cura e irreversible. De acuerdo con los estudios radiológicos con los que se cuenta, el 90 % de los gatos mayores de 12 años padecen artrosis. Uno de los síntomas de la artrosis en gatos, ya sean jóvenes o mayores, es que las articulaciones de codos, rodillas y caderas se sienten engrosadas y duras al tacto. El felino siente dolor y ante la incomodidad para moverse prefiere aminorar su nivel de actividad y de interacción con su familia. ¿Crees que tu gato puede padecer artrosis? Desde SoyUnGato te damos las claves para entender qué es la artrosis en gatos, su tratamiento y síntomas.

Índice

  1. Qué es la artrosis felina
  2. Causas de la degeneración articular felina
  3. Síntomas de la artrosis en gatos
  4. Diagnóstico de la artrosis felina
  5. Tratamiento para la artrosis en gatos
  6. Remedios caseros para la artrosis en gatos
  7. Cuánto vive un gato con artrosis

Qué es la artrosis felina

La osteoartrosis es una patología articular degenerativa e irreversible que merma notablemente la calidad de vida del gato y puede afectar tanto a una como varias articulaciones al mismo tiempo. Cuando se produce la artrosis felina, el cartílago que cubre y acolcha la articulación se desgasta dejando el hueso expuesto al roce, lo que provoca dolor, molestias y problemas de movilidad. Aunque mucha gente se pregunta cuánto vive un gato con artrosis, lo cierto es que no afecta a su esperanza de vida, sino a la calidad de esta.

En ocasiones, se forma un nuevo hueso en torno a los bordes de la articulación mientras que, otras veces, lo que sucede es que el espacio articular se ve mermado. Aunque podemos encontrarnos con casos de artrosis en gatos jóvenes, es cierto que, al tratarse de una enfermedad degenerativa, suele afectar más a los gatos mayores. Además, queremos remarcar que la artrosis felina no es lo mismo que la artritis en gatos, ya que esta última es la inflamación de las articulaciones.

Tipos de artrosis en gatos

Cabe destacar que la artrosis felina puede ser de dos tipos:

  • Artrosis en gatos primaria: está ocasionada en un hueso libre de malformaciones o traumatismos previos, por lo que la causa sigue siendo una incógnita. Es el tipo de artrosis más frecuente en gatos mayores y no se descarta que sea provocada por alguna enfermedad infecciosa o inmune.
  • Artrosis en gatos secundaria: está sobrevenida por un traumatismo, fractura o dislocación. También puede deberse a una malformación.

Causas de la degeneración articular felina

La genética, los traumatismos y la acromegalia son los factores propiciatorios más destacados de la artrosis en gatos, aunque también existen otros motivos que pueden provocarla y agravarla. La obesidad más que como causa directa de la artrosis felina actúa como coadyuvante, favoreciendo su desarrollo. Si el gato está obeso deberá perder kilos de modo progresivo para prevenir la lipidosis hepática o acumulación de grasa en el hígado.

A continuación, vamos a ver más detalladamente cuáles son las causas de la artrosis en gato:

  • Genética: determinadas razas de gatos presentan una mayor predisposición a padecer artrosis. En este sentido, los Maine coon acusan la displasia de cadera, los burmés la artrosis en los codos y los abisinios la luxación de rótula.
  • Edad: debido al desgaste de las articulaciones por el paso de los años, además de la suma de otras posibles enfermedades, la artrosis en gatos mayores es mucho más frecuente que en gatos jóvenes.
  • Obesidad: el aumento de peso hace que los huesos del gato tengan que aguantar más carga de la que deberían, por lo que puede agravar la artrosis y hacerla más complicada. Además, las temperaturas bajas afectan negativamente.
  • Traumatismos: los golpes o fracturas obligan al gato a modificar su punto de apoyo al moverse. Este hecho con el paso del tiempo degenera en una artrosis secundaria en la articulación víctima del traumatismo. Quizá te interese echarle un vistazo al siguiente post de SoyUnGato sobre "¿Desde qué altura puede caer un gato sin lastimarse?".
  • Acromegalia: esta rara enfermedad es provocada por un desequilibrio hormonal y suele cursar diabetes y, en ocasiones, también artrosis en gatos.
Artrosis en gatos: tratamiento y síntomas - Causas de la degeneración articular felina

Síntomas de la artrosis en gatos

¿Cómo saber si mi gato tiene artrosis? Todos los síntomas de esta patología sin cura tienen como protagonista al dolor, limitando su movimiento, su aseo diario y perturbando su carácter y estado de ánimo. Aun así, uno de los principales problemas que podemos detectar en un gato con artrosis es que oculta el dolor y las molestias, lo cual retrasa todo el proceso de reconocimiento de la causa que provoca la artrosis y, además, dificulta el posterior tratamiento.

Al tratarse de una enfermedad degenerativa, los cambios que sufre su cuerpo son progresivos, por lo que podemos encontrarnos con un gato con artrosis que se ha acostumbrado a los cambios en sus articulaciones y, por ello, no expone ningún síntoma de molestia. De hecho, la artrosis está infradiagnosticada en gatos, por lo que queremos remarcar la importancia de llevar a nuestro felino a sus revisiones veterinarias regulares, sobre todo si hablamos de gatos mayores donde su estado físico es más delicado.

En consecuencia, podemos enumerar como síntomas de la artrosis en gatos:

  • Dolor crónico: se produce en la articulación afectada en cuestión y hablamos sobre todo de las caderas y los codos. Aun así, nuestro gato no mostrará signos de dolor, ya que son muy buenos disimulando las molestias. En su lugar, veremos como poco a poco deja de moverse tanto y va adaptando pequeños cambios de manera diaria. Es por ello que tenemos que estar siempre atentos a su actitud para ver cualquier alteración, por mucho que sea mínima. Verás como tu gato no explora ni juega por la molestia que le causa subir y bajar escaleras, saltar, incorporarse o caminar.
  • Pueden presentarse ciertos accidentes: debido a la dificultad para acceder al arenero.
  • Su caminar parece rígido y forzado: incluso puede llegar a cojear a intervalos.
  • Su apetito disminuye y, por falta de alimentación, su peso también disminuye.
  • Cambia su actitud: está gruñón y esquivo, incluso cuando lo acaricias. Rechaza cualquier tipo de contacto físico e interacción que otros animales y humanos. Te contamos "Cómo acariciar a un gato correctamente", a continuación.
  • Comienza a dormir en lugares nuevos: como el suelo, por su fácil acceso.
  • Sus uñas están muy largas: por la falta de actividad.
  • Abandona su acicalamiento diario: luciendo nudos o un manto poco lustroso. Igualmente, puede obsesionarse con la higiene de las articulaciones afectadas. No dudes en descubrir las claves sobre "Cómo cepillar a un gato correctamente" en SoyUnGato.

Ahora que ya conoces cuáles son los indicativos de la degeneración articular felina, vamos a ver qué podemos hacer para tratar la artrosis en gatos.

Diagnóstico de la artrosis felina

Para un diagnóstico de la artrosis en gatos preciso debemos acudir al veterinario. Tan solo este profesional puede asegurarnos al 100% si nuestro gato tiene o no está enfermedad degenerativa e irreversible. Además, los síntomas que hemos mencionado en el anterior apartado también son compatibles con otras enfermedades, lo cual puede hacer todavía más complicado el diagnóstico.

El profesional realizará una anamnesis y una exploración física al gato, durante la cual puede mostrar molestias evidentes por el dolor articular que estará sufriendo. Para que el veterinario pueda juzgar la movilidad del gato, es recomendable que llevemos una grabación de nuestro felino andando por casa, así podrá ver mejor cómo son sus movimientos ya que en la consulta suelen estar asustados y quietos.

Aunque con esta evidencia en cuanto a su movilidad el veterinario ya podrá determinar si el gato tiene artrosis o no, también es posible realizar una radiografía para confirmar del todo el diagnóstico. En ella podremos ver la magnitud del daño en la articulación afectada. Para destacar la presencia de otras posibles enfermedades, y como la artrosis en gatos más es más frecuente, también es recomendable realizar analíticas. Todo ello facilitará el proceso para saber si tu gato tiene artrosis.

Tratamiento para la artrosis en gatos

¿Qué pasa si mi gato tiene artrosis? Si no tiene cura, ¿se puede tratar la artrosis en gatos? El abordaje de esta patología persigue aliviar el dolor y elevar la calidad de vida del animal. Para ello, el tratamiento se basa en una alimentación específica, en la ingesta de antiinflamatorios y en la adopción de determinados cambios en el manejo del felino. Algunos de estos cambios requerirán ajustes en tu hogar para facilitarle los accesos.

Al tratarse, por lo general, de gatos ancianos, suelen cohabitar otras enfermedades que complican el tratamiento. En consecuencia, lo adecuado en estos casos es que el veterinario realice una exploración física, varias radiografías, un examen bioquímico de la sangre y un uroanálisis.

Adicionalmente, también se puede llevar a cabo una hematología. El propósito del examen bioquímico de la sangre es testar el estado del hígado y de los riñones, el del uroanálisis valorar la densidad de la orina y con ello, la funcionalidad del riñón con el fin de afinar la elección de los fármacos idóneos.

Alimentación para gatos con artrosis

Si tu gato se halla en esta situación, el veterinario pautará una dieta húmeda, con abundante agua para evitar la deshidratación y acompañada de suplementos enriquecidos con ácidos grasos Omega 3 y 6 (para reducir la inflamación), glicosaminoglicanos, antioxidantes, metionina, manganeso y selenio por favorecer la síntesis del cartílago.

Pese a que aún no han sido probados en los gatos, los suplementos a base de condroitín y glucosamina han demostrado ser muy efectivos para regenerar el cartílago en perros, caballos y en humanos. Por tanto, pueden resultar positivos en los gatos cuya artrosis sea incipiente o leve.

Medicación

El único fármaco con licencia para ser administrado es el meloxicam. Sin embargo, está contraindicado en mininos hipotensos, con insuficiencia renal o hepática, así como en aquellos que padezcan un episodio de diarrea, deshidratación o de vómitos.

Los opiáceos buprenorfina y gabapentina no disponen de licencia, pero pueden resultar efectivos cuando el meloxican no ha funcionado. Suelen administrarse por vía sublingual. Los corticoides están desaconsejados por sus efectos secundarios, siendo la diabetes uno de los más prevalentes. Recuerda, nunca mediques a tu gato sin las supervisión de tu veterinario.

Tratamientos alternativos para la artrosis en gatos

También es posible aplicar terapias alternativas para la artrosis en gatos, como la acupuntura o las flores de Bach. Incluso podemos probar con la fitoterapia, aunque siempre tenemos que haberlo consultado previamente con nuestro veterinario y, en el caso de aplicar alguno de estos tratamientos, también debe de hacerlo un profesional. Aunque es menos frecuente, también es posible realizar una cirugía para la osteoartritis en gatos.

Artrosis en gatos: tratamiento y síntomas - Tratamiento para la artrosis en gatos

Remedios caseros para la artrosis en gatos

Aunque no existen remedios caseros para la artrosis en gatos, dado que es una patología que no tiene cura, sí que podemos llevar a cabo ciertas acciones que pueden facilitar el tiempo de vida de nuestro felino. Acompañando a los tratamientos relacionados con la alimentación y la medicación será igualmente preciso que acomodes el hogar para que a tu mascota le resulte más sencillo y, por tanto, menos doloroso transitar.

  • Deberás proveerle una cama mullida, baja y sin corrientes de aire: las cajas de cartón y las camas tipo iglú hacen que estos gatos se sientan más confortables y seguros.
  • La bandeja sanitaria deberá ser baja o carecer de laterales: al igual que el comedero y el bebedero. Todos ellos deberán estar a la misma altura y a ser posible a ras de suelo.
  • Coloca rampas: para facilitar el acceso a los lugares favoritos de tu gato que se hallen en las alturas.
  • Si existe una puerta gatera deberá estar elevada: para que el felino solo tenga que empujar para entrar o salir.
  • Decántate por la arena de grano fino al rellenar la bandeja sanitaria: sus pies doloridos lo agradecerán.
  • Encárgate de su acicalamiento cepillándolo e higienizando sus ojos y la zona perianal.

Como ves, la artrosis en felinos en una enfermedad que reclama una actuación integral para propiciar su pleno bienestar. Después de las experiencias en común que habéis vivido, en esta etapa final tu cariño y atención son todo lo que tu mascota necesita, ¿no crees?

Artrosis en gatos: tratamiento y síntomas - Remedios caseros para la artrosis en gatos

Cuánto vive un gato con artrosis

Como hemos ido mencionando a lo largo del artículo, la artrosis no afecta a la esperanza de vida del gato. En definitiva, los años de vida de un gato no dependerán de la artrosis, ya que no es una enfermedad mortal. Lo importante ante un gato con artrosis es hacer que, el tiempo que viva, lo haga sin dolor. Es por ello que remarcamos constantemente la importancia de acudir al veterinario ante cualquier signo de malestar, ya que este dolor será lo que le perjudique más en su día a día.

Este artículo es meramente informativo, en SoyUnGato.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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Bibliografía

Carlson y Giffin (2002): Manual práctico de veterinaria canina. Madrid: Editorial el Drac.

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